He aqui otro de artes marciales que salió al tiempo que Yie Ar Kung Fu y Exploding Fist.

En KFM nos encontramos con un tipo que le han secuestrado la novia (para variar) y tiene que subir 5 pisos para ir a buscar a su joyita. La novia (o hermana o lo que sea) en vez de darle un mordisco al secuestrador espera tranquilita en la buhardilla (como la del Prince Of Persia, pero esa espera entre cojines repanchingada). Bueno, a lo que vamos.

Se trata de un juego de desarrollo horizontal, y cada fase es como un pasillo largo de un caserón grande y hay que llegar al extremo del pasillo para poder subir al siguiente nivel. En Amstrad resulta curioso que en lugar de unas escaleras (como en la máquina orginal y en el resto de conversiones) hay un ascensor (para que no se canse). Al final de cada fase hay un enemigo que hay que tumbar. En la primera pantalla se trata de un tipo con un palo, en la segunda hay un mono que se transforma (sí, ya sé que es un brujo, pero en Amstrad parece un mono vestido), en la tercera un hombre gigante (que pixeliza que no veas, tienes cuadrados del tamaño de un puño) y asi ... En la última fase hay un tipo idéntico a nosotros que puede hacer los mismos movimientos. En Amstrad es casi imposible de terminar (igual que en la recreativa) porque el tio devuelve los golpes de manera que es más fácil que nos tumbe a nosotros que otra cosa. Además se dan golpes a una velocidad que no veas.

El principal aliciente del desarrollo de este juego es la rapidez con la que se desarrolla todo y el agobio que supone el tener enemigos por los dos lados. Hay diversas situaciones en que debido al número de enemigos, uno se bloquea y le retienen por ambos lados. La barra de energía empieza a bajar y mientras uno decide qué hacer, se lo han cepillado.

El juego está basado en una peli de Jackie Chan, de los que se han sacado los nombres de los protas: Thomas y Sylvia.

De este juego es muy característico la manera que tienen los enemigos de caer al suelo, ya que cuando los golpeas, se caen, pero al caer atraviesan la tarima. En Amstrad se mantiene este patrón, pero sin embargo en Spectrum pasan de vertical a horizonatal de una forma un tanto artificial.

En las fases impares vienen hombres que levantan el puño y cuchilleros, mientras que en las pares nos encontramos diversas bolas que caen del techo y que contienen gusanos, serpientes o bombas.

Si alguno de vosotros ha jugado a Vigilante se dará cuenta de que son dos juegos calcados. Mejores gráficos y más detalle en ellos, pero el mismo desarrollo del juego y la misma forma de caer de los enemigos.