Este juego de Ocean resulta muy flojo para el nivel de los juegos al que nos tiene acostumbrados esta compañía. El mayor problema reside en que el coche es un poco inmanejable al principio y va a su bola. Si los usuarios de Spectrum se quejaban del movimiento del coche en
Mask, esto resulta algo peor. Es un juego que aprovecha el tirón de una película y poco más.
Por cierto, el movimiento del coche se da un aire con el de
007 A View To A Kill