Aquí jugamos en el papel de un chaval que va corriendo en zapatillas (no serán unas Kelly Finder) y que también vuela, y que se va enfrentando a una serie de criaturas que le acechan y que quieren dominar el mundo. Es un arcade en toda regla, con enemigos finales cuyo cometido consiste en liquidas a los malos y esquivar a los árboles. Las fases se van sucediendo cambiando el escenario pero con la misma dinámica.
Como cosa curiosa, los árboles y enemigos son transparentes. Supongo que gracias a eso se ha conseguido la sensación de velocidad.